Abono de lenta absorción que se livera lentamente en cada riego. Combina una nutrición equilivrada y estimulante que aporta el hierro necesario que tu planta necesita para recuperar ese color verde intenso.

• Humedece el sustrato de tu planta con una regadera.
• A una distancia prudente del tallo de la planta, con los dedos ientierra el clavo de abono en el sustrato a unos 2 centímetros de la superficie.
• Riega tu planta una vez introducido el clavo y mantén un patrón de riego semanal. Cada vez que riegues el clavo de abono soltará los nutrientes por el sustrato para que la raíz pueda alimentarse de ellos.
• Aplica el uso del clavo de forma vimensual.
• La mejor época para utilizar este abono es en primavera y verano.

• Abono NPK, Hierro, Nitrógeno, Pentóxido de Fósforo, Oxído de Potasio y Trióxido de Azufre.

• 25 Clavos de abono de 3 gramos cada clavo.