Yo se que tu crees que no tienes un problema y que puedes dejar de comprar plantas cuando quieras. También entiendo que es perfectamente normal destinar una parte de tus ingresos a comprar plantas y que una de las metas de tu vida sea tener un piso o un lugar lo suficientemente grande para almacenar toda tu colección de plantas. Pero antes de que tu familia y amigos decidan unirse y planear una intervención, es momento de sincerarnos. ¿Quieres saber si eres un adicto a las plantas? Nosotros podemos ayudarte a descubrirlo.
¿Adicto a las plantas o un simple aficionado?
Lee cuidadosamente cada afirmación. Si te sientes identificado con la descripción, suma un punto. En caso contrario, no sumes nada.
- Eres incapaz de entrar a una tienda donde vendan plantas sin comprar alguna. No importa si es un vivero, floristería, el chino de la esquina o el Mercadona. Si hay plantas a la venta sientes el deseo irremediable de comprar aunque sea una. Si están en oferta, mejor aún porque te llevas las 2.
- Has comprado una planta porque estás triste. La planta-terapia es real y efectiva, cuando estás triste, abrumado, enojado o deprimido compras plantas. Si has llegado a comprar plantas online a medianoche, mientras tomas una copa de vino anota un punto extra.
- Has comprado plantas porque estás feliz. Y es que las grandes ocasiones deben celebrarse a lo grande y nada mejor para festejar que comprarte esa Alocasia amazónica que tienes rato viendo en internet.
- Tienes una carpeta de fotografías en tu teléfono con las plantas específicas que sueñas tener. Seguro te has enamorado de una variedad o especie particular o de un color específico. También valen los tablero de Pinterest y las fotos guardadas en Instagram. Toma un punto extra si entre esa lista hay plantas que no son nativas de tu país/continente/clima.
- Has preguntado en tiendas de plantas y viveros por una especie en particular, mostrándoles la fotografía. Puntos extra si has pedido que te avisen si les llega en un futuro cercano. Toma otro punto en caso de que no conocieran esa especie exótica.
- Has hecho sacrificios para poder comprar una planta que necesitabas. Desde viajar grandes distancias, cargar una maceta gigante en un taxi (tengo una amiga que caminó un montón cargando una monstera gigante), pedirle a un amigo que te lleve en su coche hasta ahorrar para poder costearla. Anota otro punto si descubriste que todo esto no hace falta si compras tu planta en línea, pues te la llevan a la puerta de tu casa.
- Sigues cuentas en redes sociales que sólo publican fotografías de plantas. Tú sabes cuáles son, hay las que se especializan en suculentas, otras en tropicales y otras en orquídeas. 2 Puntos extra si reposteas sus publicaciones en tus historias con gifs animados que expresan cuanto quieres esa planta.
- Tus plantas tienen nombre. Las distingues, conoces sus necesidades, sabe cuál es una diva exigente y dramática, cual es la más relajada y cuál es vengativa. Punto extra si te sabes el nombre en latín de tus plantas.
- Has intercambiado cortes de plantas con tus amigos, o por lo menos les has regalado brotes de tu Planta China del Dinero cuando se han mudado, para la buena suerte y la prosperidad.
- Te emocionas cada vez que ves hojitas nuevas en tus plantas, les tomas una fotografía y la compartes en tus redes sociales. Las flores son otra historia, pues ameritan sesión fotográfica completa.
- Conversas con tus plantas. Mientras las riegas o las revisas en las mañanas, le vas contando lo que tienes que hacer ese día o les narras lo que estás haciendo: “vamos a quitarte esas hojitas marrones, te prometo que no te va a doler.” Punto extra si les has puesto música o si lo haces con regularidad.
- No hay espacio en el borde de tus ventanas porque están llenas de plantas. Pero esto no te detiene, pues has buscado nuevas jardineras y sistemas para poder aprovechar el espacio vertical. Hasta estás aprendiendo a hacer macramé para colgarlas.
- Te has robado una hojita de una suculenta para propagarla, o un pequeño corte de una planta que has visto en la calle que quieres tener. También cuenta recoger las hojas de suculenta que caen al suelo en las tiendas. Punto extra si has logrado propagarla exitosamente.
- Tus amigos acuden a ti cuando tienen problemas con sus plantas. Te envían fotografías de sus plantas moribundas y han llegado a llevártelas para que las recuperes. Punto extra si eres capaz de saber lo que tienen con sólo ver la imagen.
- Le pides a tu pareja que no te regalen flores cortadas sino plantas en macetas. Si ya tienen tiempo juntos, ya saben que para ti la idea de una cita perfecta puede ser salir a almorzar y recorrer tiendas de plantas.
Suma todos tus puntos. Entre más alta la puntuación, más cerca estás de tener una adicción a las plantas. Si tienes más de 20 puntos, considérate un adicto irremediable. Te felicito, tu casa debe ser un poco húmeda, pero el aire ha de ser increíblemente puro.